domingo

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cierto temor al momento de oscuridad

cierto temor al momento de cerrarse

hay cierto temor en la noche
cuando uno se deja
lo dejan

cuando se deja

y cierto temor resurge como los días pasados

cierto nudo se envuelve y nos deja

sin tranquilos

para poder seguir la rutina de los días

cierto malestar que se arrastra no deja pasar la cabeza

cierta certidumbre a ponernos inciertos y pequeños

vestirnos con talco ayuda o ayudaba

pero cierto temor cierta sospecha de un corazón con síncopa adviene

y tarda en irse

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2 comentarios:

Anónimo dijo...

El temor paraliza y no permite avanzar.
Todo es cuestión de actitud. No hay que sufrir pensando cuan grandes son nuestros problemas, miedos, etc. Por el contrario, hay que decirle a nuestros temores cuan grande son nuestras capacidades para superarlos.
A no olvidarnos: la paciencia es una gran virtud y todo lo alcanza.
Un abrazo, Alexander Kasparov

Unknown dijo...

Me pareció muy bueno tu trabajo, describe con veracidad, las idas y vueltas de un joven, los miedos, espero seguir disfrutando de tus producciones. Mirta del Taller de Belgrano R