miércoles


Una gota que cae en un lago

Una hoja que se desprende de la rama de un árbol

Una ráfaga de viento que inesperadamente llega desde afuera


Así, de repente, aparece el llanto, la emoción.


Particularmente, existe una actriz inglesa, aunque ya haya participado en gran cantidad de películas norteamericanas, que tiene una especial facilidad para inducirme en ese estado.

Kate Winslet.

Aunque cueste admitirlo y provoque risa en los incrédulos, me emocioné cuando yo la vi actuar por primera vez en la mega producción de James Cameron, “Titanic”.

Me emocioné también, con creces, en la genial y creativa “Brillante resplandor de una mente sin recuerdos”.


Hoy a la noche, volví a hacerlo cuando vi la película “Iris”, sobre la relación entre la novelista Iris Murdoch y su esposo, John Bayly.

Me gusta encontrar coincidencias en la vida. Puede sonar supersticioso.
Pero, al menos me agrada pensar en la certeza del poder que Kate Winslet, su cara, su rostro y su forma de mirar, tienen sobre mí.

Golden slumbers...

Y gracias, amigo Kasparov, por estimularme a seguir escribiendo esto.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

De nada, Leo.
Espero que sigas recorriendo este camino.
A vos te emociona la genial Kate Winslet y, te puedo asegurar, que tus posteos despiertan reflexiones e identificaciones en varios de tus fieles lectores.
A seguir escribiendo y a disfrutar mucho las últimas tres semanas que vamos a compartir en la Facultad. Te aseguro que se te va a extrañar.
Un abrazo grande,
Alexander Kasparov

Anónimo dijo...

Hola Leo. Hoy viendo los recordatorios en mi celular me encontré con la dirección de tu blog y entre.
En una carpeta titulada "Mis imágenes" guardo en la computadora fotos que me gustan. Y entre ellas tengo dos de la película "Eternal sunshine of the spotless mind". Una en la que los proptagonistas están tirados sobre el hielo; y otra casi igual a la que publicaste, pero en la que Kate está levemente recostada sobre el pecho de Jim y con la mirada perdida. Te la mando por mail. Beso.

Anónimo dijo...

Ya hay nuevos posteos pero quería comentar este porque si hay algo que me gustó de esa película es la manera en que demuestra hasta qué punto estamos hechos de algo tan intangible como los recuerdos...si mañana olvidaramos toda nuestra vida...seguiríamos siendo las mismas personas? no podríamos construir nunca un lazo profundo con nadie, todo tendría tan poco sentido que la mejor opción sería desvanecerse...estamos hechos de algo tan evanescente como eso, de la misma materia que están hechos los sueños...
Un beso a los tres que participaron de este posteo.

Noe.