miércoles

The Laughing Heart

"your life is your life
don’t let it be clubbed into dank submission.
be on the watch.
there are ways out.
there is a light somewhere.
it may not be much light but
it beats the darkness.
be on the watch.
the gods will offer you chances.
know them.
take them.
you can’t beat death but
you can beat death in life, sometimes.
and the more often you learn to do it,
the more light there will be.
your life is your life.
know it while you have it.
you are marvelous
the gods wait to delight
in you".


Charles Bukowski

jueves

Interrogante

En el arcaico sistema de enseñanza actual, es útil formular la siguiente pregunta, para que algo cambie en la ordinaria secuencia de las cosas:

¿ Cuánto ego debe sacrificar el docente al evaluar a su alumno ?

martes

"Frente a una humanidad de monos cobardes y perros mojados, la pintura de Van Gogh demostrará haber pertenecido a un tiempo en que no hubo alma, ni espíritu, ni conciencia, ni pensamiento; tan sólo elementos primeros, alternativamente encadenados y desencadenados.
Paisajes de intensas convulsiones, de traumatismos enloquecidos, como los de un cuerpo que la fiebre atormenta para restituirlo a la perfecta salud.
Por debajo de la piel el cuerpo es una usina recalentada,
y por fuera,
el enfermo brilla,
reluce,
con todos sus poros,
estallados,
igual que un paisaje
de Van Gogh
al mediodía.
Sólo la guerra perpetua explica una paz que es únicamente tránsito,
igual que la leche a punto de derramarse explica la cacerola en que hervía.
Desconfiad de los hermosos paisajes de Van Gogh remolinantes y plácidos,
crispados y contenidos.
Representan la salud entre dos accesos de fiebre ardiente que está por pasar.
Rpresentan la fiebre entre dos accesos de una insurrección de buena salud.
Un día la pintura de Van Gogh armada de fiebre y de buena salud,
retornará para arrojar al viento el polvo de un mundo enjaulado que su corazón no podía soportar".

Antonin Artaud.

viernes




Oración gestáltica

"Yo hago lo que hago,
tú haces lo que haces.
No vine a este mundo a cumplir tus expectativas.
Tú no viniste a cumplir las mías.
Yo soy yo.
Tú eres tú.
Si por suerte nos encontramos
será maravilloso.
Si no, no tiene remedio"

Fritz Perls.

jueves

Claves para impactar a su audiencia

Hable despacio

Haga mención de los libros que leyó

En lo posible, mencione qué tipo de ediciones son.

En lo posible de lo posible, mencione si se trata de una traducción.

En lo posible de lo posible de lo posible, critique al traductor.

A continuación

Mencione un concepto que su audiencia no sepa.

Mencione el mismo concepto, traducido al francés.

Para un mayor impacto, mencione el concepto traducido al alemán.

Para un mayor impacto, mencione el concepto en latín.

Para un mayor impacto, mencione el concepto en griego.

Para un mayor impacto, hable sobre Platón.

Para un mayor impacto, hable sobre Aristóteles.

Es importante seguir el orden de los impactos.

Quien ya sepa algo de francés, seguramente se verá obnubilado por lo que un griego pensaba cuatrocientos años antes de que naciera Jesucristo.

Para que la audiencia no se harte de sus peroratas, diga algo gracioso relacionado a los conceptos antes mencionados.

A continuación,

si aún no provocó el impacto que buscaba,

escriba en el pizarrón.

Dibuje flechas.

Escriba los conceptos.

Más tarde, dibuje círculos que engloben esos conceptos escritos.

Variaciones sobre Cómo impactar a su audiencia:

Cuando diga el concepto, grite.

Si existe cierto porcentaje de su audiencia que no le prestó atención hasta ese entonces, a partir del grito, muy posiblemente lo hará.

Más Variaciones sobre Cómo impactar a su audiencia:

Cuando diga el concepto, mencione a continuación una larga lista de sinónimos del mismo.

En lo posible, dígalos con un tono lastimoso y con cierta rima.

Trate de encontrar a la hora de guionar su discurso la mayor cantidad de sinónimos posibles.

Mensaje para futuros impactadores:

Recuerde que usted es el amo y señor del concepto mencionado.

Aunque usted no lo haya inventado o desarrollado, usted lo dice mejor que nadie, mejor que su audiencia.

Y recuerde que lo importante es dejar en claro que usted sabe más y mejor, aunque de lo que se trata es que usted leyó antes y en repetidas ocasiones.

viernes

Susurrar al oído

"Cierra los ojos, entonces verás

Rompe tus muros, entonces construirás

Aprende a aguardar, entonces irás

Déjate caer, entonces en pie estarás"




Lothar Kempter

martes

Cómo somos con Internet ?

¿Puede la tecnología recrear la totalidad de los canales que conforman una comunicación? ¿Puede hablarse de comunicación mediante tecnologías multimedia? ¿Equiparará la virtualidad a la realidad? ¿No era (la comunicación) una comunión entre subjetividades?

Interrogantes tales acuden a mi mente tras leer a Jean Baudrillard y recordar las críticas de Hubert Dreyfus -quien retoma la postura de de Merlau-Ponty- acerca de una potencial eficacia de los medios tecnológicos en recrear una escena comunicacional.

A través de sus cavilaciones, René Descartes llegó a ponderar tanto la mente que consideró al cuerpo como algo contingente, prescindible. Todo vínculo que obtenemos, decía Descartes, se produce a través de la mente. Más precisamente, mediante la duda metódica.

En cambio, Merlau-Ponty habla de una experiencia óptima del mundo, por la cual necesitamos el cuerpo para obtener una buena percepción de la realidad. A través del cuerpo, sostiene Ponty, nos movemos y adaptamos -como haría un microscopio- hasta lograr una óptima visión del exterior.

Desde mi punto de vista, el ciberespacio puede tornarse un lugar frío y desolador. Así de sombrías pueden resultar las salas de chat, repletas de usuarios solitarios, en busca de algo indefinido, impreciso.

No obstante, las nuevas posibilidades que brindan los medios electrónicos, como Internet, el e-mail, el blog y los diarios digitales, son definitivamente útiles; tampoco hay que dejarse llevar por el discurso apocalíptico tecnófobo.

Pero definitivamente la sobre información de texto, imágenes, sonidos y videos provoca vértigo. La sobre abundancia constituye un nuevo tipo de ausencia.

Pero ¿Cuáles serán las consecuencias de este continuo y forzado retiramiento de las personas a sus cubículos personales para encontrarse con el otro?

Dos ideas finales, relacionadas a lo que indica Baudrillard, para ampliar un posible debate.

Al encuadre de una cámara siempre le faltará paisaje por retratar.

Lo que gana en precisión el zoom, lo pierde en cobertura.

Verdades silenciosas

Muchas veces vemos en revistas, afiches y/o spots de la televisión, publicidades que presentan un determinado producto y que añaden junto al diseño del aviso, distintos tipos de mensajes, los cuales tienen como objetivo identificar a la marca en cuestión y, a su vez, asociar lo que se ofrece a una particular forma de ser.

Muchas otras veces, leemos, escuchamos o percibimos estos mensajes cuando estamos con prisa por llegar a un lugar determinado. Los observamos “de refilón”, al paso, sin prestar verdadera importancia al mensaje transmitido.

Sin pretender afirmar que se produce un efecto similar a la subliminalidad estudiada por las investigaciones estadounidenses de las décadas 50 y 60, tal vez, debido a esa observación tenue y supuestamente desinteresada, el mensaje queda muy bien grabado en nuestras mentes o, por lo menos, lo recordamos sin crítica alguna. De haber detenido nuestra razón sobre él por algunos minutos muy posiblemente sería distinta nuestra conclusión sobre la publicidad en cuestión.

La escena final de la película Brazil, del realizador estadounidense Terry Gilliam, expresa la anterior idea de una forma artística y, además, con suma crudeza. Allí, un camión recorre una extensa avenida que es bordeada en sus dos márgenes por altas paredes. La impresión que uno tiene cuando observa dicho escenario es que ambos paredones se encuentran repletos por todo tipo de afiches, como los que comentábamos antes.

Podríamos imaginar el futuro hoy. Más aún, lo podríamos imaginar hoy y en Buenos Aires. ¿Qué es la autopista Lugones sino el final de la película Brazil?

En cuanto a los polémicos mensajes a los que estoy haciendo referencia, podemos señalar, por ejemplo, a la oración “Ser egoísta no está mal”, en una de las últimas propagandas de los postres de McDonald´s. O “Querer lo que tenés”, en uno de los gigantescos afiches publicitarios de la marca de zapatillas Converse.

Mientras una de las publicidades condensa la peor cara del american way of life, la otra encarna perfectamente la fetichización de las mercancías de la cual hablaba Karl Marx.

Si hiciéramos una lista de los “caballitos de batalla” utilizados por las grandes compañías para intentar vender la mayor cantidad de sus nuevos productos, posiblemente encontraríamos algún tipo de “vademécum del buen publicista” con una serie de enunciados, de verdades no dichas que se “barajan” en el momento de planificar una campaña publicitaria. Nuevo, bello, joven, rápido, elegante y/o sano pueden ser las ideas/conceptos que residen en el telón de fondo de muchas de las publicidades actuales.

En este momento, el lector tal vez escuchará ecos de la escuela de Frankfurt y se le harán presentes reminiscencias de las críticas de Benjamin, Adorno y Horkheimer al capitalismo y al estilo de vida de la clase social que lo acompañó y alimentó: la burguesía. Creo que es válido y, aún más, necesario desempolvar esas ideas y voluntades expresadas en la primera mitad del siglo pasado.

Y para ello, preguntarnos, ¿Qué estamos comprando cuando compramos? ¿Qué queremos transmitir vistiendo determinada marca? ¿Qué palabras invisibles se conjugan en dicho acto? ¿Y hasta que punto tomamos como ciertas las sigilosas verdades transmitidas por las publicidades?

Evidentemente, existe una contundente tiranía de las imágenes, las cuales están al servicio del sistema capitalista. Una dictadura de imágenes está presente en las distintas pantallas que nos acompañan durante el día, a saber; televisión, Internet y celulares.

La rapidez con la que se vive actualmente tampoco permite algún tipo de reflexión sobre lo que nos circunda. Lo importante es ir rápido hacia el destino. No cuestionar el empapelado gráfico que nos rodea. Y, en esa vorágine, ir absorbiendo la forma y contenido de publicidades. Pero, sobre todas las cosas (y a este punto me quiero acercar), hacer carne los mitos -como analizaba lucidamente Roland Barthes- de los cuales las publicidades hablan. Esas verdades lejanas e inalcanzables que permanecen jugando en el fondo de nuestra psique. Esa construcción de profundas y silenciosas necesidades.

Más bien, hablar de la rapidez como un factor que gobierna nuestra vida actual ya no es suficiente. Como advierte Scott Lash, es la aceleración de los tiempos la que produce nuevas formas de pensamiento, comunicación y existencia. En ese sentido, dicha aceleración no deja tiempo para pensar una alternativa, una solución diferente a un problema determinado. No hay tiempo para elegir otro camino. Por el contrario; un producto, un sueldo y una compra. Y, como los denominados autores posmodernos señalan, una constante borradura del pasado y el futuro.

Al fin y al cabo, dentro del curso del funcionamiento social actual, detenerse y pensar la razón de nuestras acciones ya implica una acción revolucionaria.

jueves

tengo un caballo

"tengo un caballo. el caballo tiene cuatro patas.
tengo un gramófono. sobre el gramófono duermo.
tengo un hermano. mi hermano es escultor.
tengo un abrigo. tengo un abrigo para no tener frío.
tengo una planta. tengo una planta para que haya verde en la habitación.
tengo a maruska. tengo a maruska porque la amo.
tengo cerillas. con cerillas enciendo mis cigarrillos.
tengo un cuerpo. con mi cuerpo hago las cosas más bellas que hago.
tengo destrucción. la destrucción me provoca un montón de problemas.
tengo noche. la noche entra en mi habitación a través de la ventana.
tengo pasión por las carreras de automóviles. porque las carreras de automóviles
son mi pasión corro carreras de automóviles.
tengo dinero. con dinero compro pan.
tengo seis poesías realmente buenas. espero escribir más.
tengo veintisiete años. todos estos años pasaron como un relámpago.
tengo relativamente bastante coraje. con el coraje combato la estupidez humana.
tengo mi onomástica el siete de marzo. me alegraría que el siete de marzo fuese un bonito día.
tengo una amiga pequeña de nombre bredica. cuando a la noche la ponen a dormir dice salamun y se duerme"

Tomaz Salamun

miércoles

el vendedor

acosa

interpela

interroga

molesta

interfiere

estorba

ayuda

inquiere

observa

acecha

espera

acciona

merodea

ataca

devora

sonríe

miente

habla

conversa

desespera

piensa

fantasea

recorre

camina

escapa

regresa

y

finalmente

se marcha

domingo

6 cosas imposibles para antes de acostarse

.

sentir desde el cuerpo de otra persona

.

un perro que entendiera cuando le hablamos pero prefiriera sólo ladrar como respuesta

.

una obra de arte bella por su utilidad económica

.

un político con gran poder de empatía

.

un domingo que no sea apoteótico

.

una virtud que se consiga por Internet

.

viernes

saudades de Semana Santa

de chico

pensaba uno

yo voy a amar

voy a querer

con la pureza de mi corazón

no voy a engañar

voy a querer

con la franqueza de mi corazón

pero

cierta

ansiedad

incertidumbre

desconfianza

nos cambia

transforma

desvirtúa

y queremos

hasta donde podemos

hasta donde queremos

de a poquito

de a sorbitos

de a ratitos

por qué el cambio?

por qué no seguir con nuestra promesa de antaño?

qué aconteció?

qué ansias de grandeza nos perdió? confundió?

parece ser

que quien no se quiere

no quiere

no ama

si no

todo lo contrario

pues

a ponerse bien

mejor

estable

para ponerse

bien

mejor

estable

con el otro

la otra

los otros

y nuevamente

con

uno

mismo

martes

Pérez

Pérez nunca salía. Se quedaba todos los días y noches en su casa. Se limitaba a pasar las horas reordenando su cuarto, hojeando algún libro o hablando en voz alta.

Como vivía solo generalmente mantenía conversaciones con él mismo para recordar la sonoridad de la voz humana.

Pérez no tenía obligación de salir de su hogar ya que tenía cubiertas todas sus necesidades básicas: trabajaba a distancia desde su casa y pedía todo lo necesario por correo o Internet.

Parecería que Pérez se podía trasladar siempre y cuando fuese dentro del perímetro de su propiedad.

Tenía noticias del mundo a través de los diarios, la radio o la televisión pero no mantenía ningún contacto real con otro ser humano.

Pérez tenía intenciones de salir pero existía algo que lo retenía. Sentía desde hacía un tiempo que algo no andaba bien. Con el tiempo empezó a perder el rastro de lo que sucedía en el exterior.

Entonces, con el lento pasar de sus horas, Pérez comenzó a relacionarse con otro tipo de realidad. Comenzó a sentir que algo se había generado. Empezó a entender cosas que nunca había pensado.

Pérez se fue elevando hasta transformarse en ente. Ahora, se mantiene en el aire, impávido, como la niebla que vive sobre los pantanos.